
Consejos para lavar el acrílico
El primer paso para limpiar el acrílico será determinar qué tan potente es el limpiador que debemos usar, considerando qué tan sucio esté el elemento a limpiar. Observa el objeto que desees limpiar y en base a la cantidad de suciedad que éste presente considera si debes o no usar un limpiador.
Cuando nos enfrentamos a una suciedad superficial, entonces agua bastará para limpiar. Sin embargo, en caso de que el elemento que quieras limpiar presente una cantidad mayor de suciedad, intenta con una mezcla de limpiador de vidrio, detergente no abrasivo y agua; toma un balde y mezcla allí todos los «ingredientes».
En instalaciones interiores, donde no se puede usar agua con libertad, la lámina debe ser antes que nada sacudida ligeramente con una franela suave y limpia, sin frotarla. Después se puede limpiar la lámina con mucho cuidado usando una franela suave y mojada. Hay que mantener la franela libre de polvo enjuagándola frecuentemente con agua limpia.
Una vez que has limpiado con el agua, usa un trapo diferente para pasar la solución de limpiador de vidrio, detergente (no abrasivo) y agua para terminar de quitar la suciedad del acrílico. En este paso tampoco debes mover el trapo en círculos.
Es importante que uses esta fórmula para limpiar y no los productos por separado, ya que el limpiador de vidrio y el detergente por separado y sin agua, pueden producir resecamiento en el acrílico, causando que éste se quiebre.
Técnica para quitar manchas
Para limpiar las lámina ACRYGLAS de manchas de grasa y aceite se puede usar keroseno o nafta alifático no aromatizados. No se debe usar solventes como acetona, benceno, tetraclorido de carbón, líquido de extinguidor, líquido para lavado en seco y tíneres, ya que todas estas substancias atacan la superficie de la lámina de acrílico.
No se debe usar tampoco spray limpiador de ventanas ni limpiadores abrasivos para cocinas para limpiar el acrílico.
Para limpiar el acrílico debes utilizar paños suaves y limpios, que no dejen pelusas ni tengan costuras o hilados gruesos.
El detergente para lavar la vajilla es sensacional para quitar suciedades, pero puede dejar manchas en el acrílico. Además, es un producto que debe ser frotado para accionar su poder limpiador, y esto también puede dejar residuos en el material. Úsalo siempre disuelto en agua tibia, aplicando con golpecitos y una esponja, y enjuaga abundantemente.
El proceso de enjuague es también un punto importante, pues los productos abrasivos mal enjuagados dejan un minúsculo residuo del mismo sobre el acrílico, lo que propicia el resecamiento y el resquebrajamiento de la lámina o producto en acrílico. Esto creará manchas y marcas, y dejará el acrílico vulnerable a roturas por acción del clima, por calor o por la misma sequedad del ambiente.


Pulido
Para restablecer o sacar brillo a las láminas de ACRYGLAS se puede utilizar un pulido eléctrico o neumático, aunque también es posible pulir a mano.
Pulido a mano
Aplica a la lámina silicón automotivo o cera en pasta con una franela blanca, dejando una capa delgada y uniforme, después frote repetidamente con la franela, por último limpie con otra franela (no aplique en zonas impresas para no dañarlas).
Pulido mecánico
Se puede utilizar motor de 3 a 5 HP con ruedas pulidoras equipadas con disco de franela suave y unidos para formar una rueda de aproximadamente 2.5 a 7.5 cm de espesor y de 15 a 30cm de diámetro. También se puede emplear herramientas eléctricas o neumáticas del tipo portátil equipadas con disco de franela. Se recomienda trabajar a velocidades entre 1000 y 1800RPH. Nunca use rodetes que hayan sido utilizados para pulir metal, la viruta ocasiona rayaduras al acrílico.